La composición, el
concepto
En toda composición, los elementos
que se sitúan en la parte derecha, poseen mayor peso visual, y nos
transmiten una sensación de avance. En cambio, los que se encuentran
en la parte izquierda, nos proporcionan una sensación de ligereza.
Esto también se observa, si lo aplicamos en la parte superior de
un documento, posee mayor ligereza visual, mientras que los elementos
que coloquemos en la parte inferior, nos transmitirán mayor peso
visual.
Actualmente no existe una composición perfecta. Cada composición
dependerá de su resultado final, para todo ello, es necesario
conocer todos los aspectos y formas para obtener un resultado con un
cierto equilibrio.
Las proporciones, la forma, el tamaño.
Uno de los formatos más conocidos e utilizados es el DINA-4.
Podemos limitar las proporciones de nuestra composición a través
del color.
También existe las
formas, las angulares y alargadas amplían el campo de visión,
mientras que formas angulares cortas, nos transmiten la sensación de
timidez y humildad.
Las formas redondas (modelo curvilíneo y rectangular), la
proporción y la simetría, suelen combinarse, las formas en sus
variantes también son simétricas. Estas formas crean armonía,
suavidad y perfección. Por ejemplo, las formas simples y regulares
son las que se perciben y recuerdan con mayor facilidad. Las formas
simétricas, en el mundo de la naturaleza, un ejemplo del orden
geométrico sobre la formación de sus estructuras vivientes.
El tamaño de un elemento, en relación al resto, también
presenta diferentes definiciones. Las formas grandes, anchas o altas,
se perciben cómo, más fuertes, pero las más pequeñas, finas o
cortas, simbolizan la debilidad y delicadeza.
La escala
Decimos que existe una escala cuando se da una relación
matemática (proporción) entre las dimensiones de distintos
elementos. Una escala, por tanto, se puede representar mediante un
número o una fórmula.
La escala normalmente se usa en cartografía, planos, mapas...
para poder representar una medida proporcional al tamaño real. Es
cuando citamos, por ejemplo, este plano está en escala 1:10. Este
concepto hace referencia a que, para realizar el plano, se ha
aplicado un factor de reducción determinado (en este caso, dividir
por diez), para poderlo dibujar en un lugar más pequeño, sin que
pierda sus proporciones.
Algo más que medidas
En el diseño gráfico, las propiedades de los elementos visuales
son relativas, dependen del resto de elementos presentes en la
composición. En este caso, la escala hace referencia a la relación
entre los tamaños y otras características de las piezas que forman
el diseño con sus vecinas.
"Otras características" hace referencia al aspecto
global de un elemento: por ejemplo, si se usan colores más vivos,
oscuros o contrastados, la "presencia" o sensación visual
de tamaño resulta mayor que la de otros elementos más pálidos,
claros o difuminados.
La proporción relativa entre elementos debe ser equilibrada,
usando una escala correcta. En una composición gráfica la escala se
usa tanto para distribuir el espacio como para equilibrar las
proporciones de los elementos.
La sección áurea
La regla áurea es conocida con numerosos nombres. La podemos
llamar, entre otros, sección áurea, divina proporción, razón
dorada, número áureo, etc.
La regla o sección áurea es una proporción entre medidas. Se
trata de la división armónica de una recta en media y extrema
razón. Esto hace referencia a que el segmento menor es al segmento
mayor, como éste es a la totalidad de la recta. O cortar una línea
en dos partes desiguales de manera que el segmento mayor sea a toda
la línea, como el menor es al mayor.
Dicho de otro modo, la sección áurea establece que la relación
entre lo pequeño y lo grande es la misma que la relación entre lo
grande y el todo.
De esta forma se establece una relación de tamaños con la misma
proporcionalidad entre el todo dividido en mayor y menor, esto es un
resultado similar a la media y extrema razón.
Esta proporción o forma de seleccionar proporcionalmente una
línea se llama proporción áurea, se adopta como símbolo de la
sección áurea (Æ) y la representación en números de esta
relación de tamaños se llama número de oro o número
áureo y es igual a 1,618. A este número se le conoce con
el nombre de la letra griega Phi (pronunciado Fi).
Historia de la divina proporción en composición
A lo largo de la historia de las artes visuales han surgido
diferentes teorías sobre la composición. Platón decía: "Es
imposible combinar bien dos cosas sin una tercera, hace falta una
relación entre ellas que los ensamble, la mejor ligazón para esta
relación es el todo. La suma de las partes como todo es la más
perfecta relación de proporción".
Vitruvio, importante arquitecto romano, acepta el mismo principio,
pero dice que la simetría consiste en el acuerdo de medidas entre
los diversos elementos de la obra y éstos con el conjunto.
Inventó una fórmula matemática para la división del espacio
dentro de un dibujo conocida como la sección áurea. Se basaba en
una proporción dada entre los lados más largos y los más cortos de
un rectángulo. Dicha simetría está regida por un módulo común,
que es el número. Definido de otra forma, bisecando un cuadro y
usando la diagonal de una de sus mitades como radio para ampliar las
dimensiones del cuadrado hasta convertirlo en "rectángulo
áureo". Se llega a la proporción a:b = c:a.
Dicho esto, y según Vitruvio, se analiza que, al crear una
composición, si colocamos los elementos principales del diseño en
una de las líneas que dividen la sección áurea, se consigue el
equilibrio entre estos elementos y el resto del diseño.
Este razonamiento de Vitruvio sigue vigente hoy en día a la hora
de componer, ya sea un edificio, una fotografía o un diseño sobre
papel ya que se cree que seguir esta regla da como resultado trabajos
más equilibrados y armoniosos.
Si quieres leer más sobre la sección áurea en fotografía
puedes leer la página que dedicamos a ella en la sección de
fotografía o haciendo click Aquí.
El equilibrio en una composición
Cada forma o figura representada sobre un papel se comporta como
un peso, un peso visual, porque ejerce una fuerza óptica.
Los elementos de nuestra composición gráfica pueden ser
imaginados como los pesos de una balanza. Una composición se
encuentra en equilibrio si los pesos de los distintos elementos que
la forman se compensan entre sí.
Este
criterio se aplica principalmente al diseño global, es decir, a la
disposición de los elementos sobre la superficie de trabajo.
Normalmente se busca este equilibrio, aunque en alguna ocasión se
provoca un desequilibrio intencionado para conseguir unos resultados
específicos en un diseño.
Definimos el equilibrio como una apreciación subjetiva, en la
cual, los elementos de una composición no se van a desprender.
El equilibrio simétrico
En una composición se puede conseguir el equilibrio a través del
uso de líneas y formas. Todos los pesos deberán estar compensados
para obtener el equilibrio ideal.
Como medición del peso de las formas y líneas que utilizamos en
una composición, se observa la importancia que tienen los objetos
dentro del diseño o creación que queremos representar, intentando
equilibrar los elementos de mayor importancia con los de menor
importancia, y los de mayor peso con los de menor.
Clasificamos el equilibrio en dos tipos: simétrico y asimétrico
El equilibro simétrico se produce cuando al dividir una
composición en dos partes iguales, existe igualdad de peso en ambos
lados. No se encuentran elementos que sobresalgan más que el resto
en importancia y peso.
Un ejemplo más inmediato de simetría en el mundo orgánico es la
mariposa, cuyas alas poseen simetría axial bilateral, en la que el
eje es el cuerpo del insecto. Sus dibujos están dispuestos
simétricamente respecto al eje. Esta regularidad constituye, a nivel
de percepción, un factor estético de armonía.
La
creación de un diseño simétrico nos transmite una sensación de
orden.
El equilibrio asimétrico
Un equilibrio es asimétrico cuando al dividir una composición en
dos partes iguales, no existen las mismas dimensiones en tamaño,
color, peso etc., pero existe un equilibrio entre dos elementos.
En el equilibrio asimétrico, al ser desiguales los pesos a un
lado y otro del eje, el efecto es variado.
La asimetría nos transmite agitación, tensión, dinamismo,
alegría y vitalidad; en este tipo de equilibrio una masa grande
cerca del centro se equilibra por otra pequeña alejada del aquel.
El contraste de tono
El contraste actúa a través de la atracción o excitación del
público observador, mediante la combinación de diferentes
intensidades o niveles de contraste, en el color, el tamaño, la
textura, etc. Los contrastes pueden proporcionar mayor significado a
una composición.
El
contraste de tono se basa en la utilización de tonos muy
contrastados, la combinación de claro-oscuro; el mayor peso lo
tendrá el elemento con mayor oscuridad. Para que este perdiera
protagonismo en el diseño, tendríamos que disminuir la intensidad
del tono y redimensionarlo después, para que no perdiese equilibrio
en la composición. Este tipo de contraste es uno de los más
utilizados en composiciones gráficas.
El contraste de colores
El tono es una de las dimensiones del color más importantes. El
contraste más efectivo se obtiene combinando los diferentes tonos.
El contraste creado entre dos colores será mayor cuanto más
alejados se encuentren del círculo cromático. Los colores opuestos
contrastan mucho más, mientras que los análogos apenas lo hacen,
perdiendo importancia visual ambos.
El contraste de escala
El contraste de escala se consigue a través de la contraposición
de diferentes elementos a diferentes escalas de las normales, o el
uso de medidas irreales.
Utilizando
este recurso, la percepción del elemento se encuentra alterado. Esta
clase de contraste es utilizado en la fotografía y pintura, para
atraer la atención del espectador de forma muy efectiva y eficaz.
El contraste de contornos
El contraste de contornos irregulares destaca de forma importante
sobre los regulares o más conocidos. Este tipo de contraste es ideal
para captar la atención del usuario observador a determinados
elementos de una composición.
No obstante, no hay que abusar del uso de este tipo de contraste,
sobre todo si se combinan con otros tipos de contraste, ya que pueden
ser un centro de atracción visual demasiado fuerte y potente.
Además, acaban creando mucha tensión en el espacio que les rodea.